INTRODUCCIÓN
El Mantenimiento Productivo Total, o TPM por sus siglas en inglés, es una herramienta muy poderosa que puede ayudar a mejorar sustancialmente los resultados relacionados con la Efectividad Total de los Equipos (OEE) de la planta, pero para lograr los objetivos, es vital llevar a cabo una implementación correcta y contar con información confiable sobre los problemas existentes.
El OEE es un parámetro ampliamente utilizado en el mundo para medir el grado de aprovechamiento de la capacidad instalada. En una planta típica, los porcentajes del OEE se ubican en el rango de entre 20% y 50%, debido a tiempos muertos (el tiempo que los equipos están sin trabajar, ya sea por fallas de máquinas, problemas operativos, programación de la producción, o políticas de trabajo de la empresa), ineficiencias (no operar los equipos a su capacidad de diseño), o generación de producción defectuosa (el tiempo empleado para fabricar productos que no pueden venderse a un cliente por problemas de calidad, o bien, que tienen que venderse con un precio menor).
Para la correcta medición del OEE se requiere tener registros detallados de todos los paros en los equipos, información de los problemas que impidieron correr los equipos a su máxima velocidad o capacidad y registros detallados de los defectos producidos. Si esta información no existe o es deficiente, incompleta o imprecisa, será muy difícil llegar a conclusiones que permitan definir con claridad las acciones de mejora que deben implementarse, por lo que el primer paso debería ser la construcción de un sistema efectivo para registrar esos datos.
Implementar TPM es algo que difiere entre empresas y aún entre plantas de la misma empresa. Cada planta es diferente y es necesario conocer exactamente el estado de cada una antes de poder proceder a la implementación. Se requiere preparar un traje a la medida cada vez que se va a llevar a cabo una implementación de TPM.
Preparar un buen plan de implementación nos obliga a conocer cómo está en detalle cada planta y para esto, lo más recomendable es llevar a cabo un diagnóstico en base a la visión de lo que debería ser el ideal de la implementación de TPM y los objetivos que deben lograrse o los problemas que deben resolverse con la puesta en operación de esta poderosa herramienta de mejora.
DESCRIPCIÓN
Antes de iniciar cualquier programa de mejora es necesario saber en dónde se encuentra la empresa en relación con los benchmarks de una empresa de clase mundial en cuanto a la implementación de TPM.
Productivity ha desarrollado todo un proceso de evaluación basado en los conceptos de los cinco pilares del TPM que permite calificar un total de 121 diferentes aspectos que nos dan una clara imagen del estado que guarda una empresa contra las mejores prácticas de TPM que existen en el mundo. Con esto se pueden sacar una serie de conclusiones que permiten definir cómo se debe preparar un buen plan de implementación de TPM.
En esta evaluación se revisan una serie de aspectos relacionados con los pilares del TPM y la organización en su conjunto:
METODOLOGÍA
La metodología que emplea Productivity Latinoamérica, para desarrollar el Diagnóstico consta de 4 Etapas:
A continuación, se detalla el contenido de cada etapa:
1.- Estudio y análisis de la información previa de La Empresa: (Información que deberá proporcionarse antes de iniciar)
2.- Planeación del Diagnóstico.
3.- Aplicación de Entrevistas a Personal de Diferentes Áreas.
NOTA: La determinación de las personas a entrevistar se hará una vez que se cuente con los organigramas de La Empresa y se haya analizado la información preliminar.
4.- Preparación y Presentación de Conclusiones y Recomendaciones
Duración del Diagnóstico:
El tiempo necesario para llevar a cabo un diagnóstico es de 4 (cuatro) días – consultor.
En el Diagnóstico propuesto, los 4 días – consultor se utilizarán de la siguiente forma: